AUTOEVALUACIÓN

Lo primero que diré es que desde el primer día me sorprendió esta asignatura, lo cual despertó un interés en mi que me ha ayudado mucho a la hora de aprender cosas nuevas. Desde el momento en que Víctor nos dijo las formas de evaluar quise llevar un seguimiento de la asignatura día a día y traté de buscar formas originales de plasmar lo aprendido. Busqué cosas de años anteriores y vi que un buena forma de compartir conocimiento era hacer un blog (método que ha utilizado la mayoría de gente). Al principio iba un poco perdido, no sabía manejar muy bien mi blog y tampoco tenía demasiado claro que podía escribir, ya que al ser un lugar accesible a todo el mundo no quería poner cualquier tontería sin sentido. Poco a poco fui trabajando mis entradas, las cuales hacía poco a poco y sobre los temas que más interés despertaban en mi.

En mi opinión he llevado un buen seguimiento de la asignatura, plasmando mi conocimiento en la mayoría de los temas tratados en clase. Es cierto que tuve un bajón en la época de fallas y pascua, pero el resto del tiempo he intentado ir al día con mis entradas. He intentado contestar a todas las preguntas planteadas en clase con una opinión objetiva y con los conocimientos que he ido adquiriendo día a día.

Cuando se han propuesto trabajos siempre he intentado ser lo más original posible e indagar al máximo y con fuentes fiables sobre los temas correspondientes. Es el caso por ejemplo del trabajo de los posters, el cual nos llevó un gran trabajo a todo el grupo pero creo que quedó genial y todos aprendimos. Decidimos dedicar una parte importante del tiempo buscando fuentes fiables de información y encontramos una buena forma de plasmar toda la información obtenida.

Como he dicho anteriormente el interés que he puesto en la asignatura me ha llevado a adquirir unos conocimientos que considero bastante valiosos de cara a ser un futuro educador de movimiento. He aprendido cosas que en algunos casos sabía que existían  y no les daba valor y otras que nunca había escuchado. Pocas veces había pesado en la educación a través del movimiento, sabía que se podía lograr pero nunca me había planteado como conseguirlo. Otra cosa a la que le doy mucho valor es a la intencionalidad que hay que darle a las cosas que pretendemos enseñar, ya que no podemos dejar que las cosas surjan porque si, debemos enfocar nuestras clases con un objetivo marcado desde el primer momento.

Por último quería comentar que estoy bastante orgulloso de mi trabajo en general, pero hay ciertas entradas y trabajos de los cuales aun lo estoy más. Creo que algunas cosas de las que he hecho realmente han ayudado a ciertas personas que se han tomado la molestia de leerlas. Es el caso de alguna entrada de mi blog, que por los comentarios que me han puesto veo que han podido ser de interés. Y el trabajo por el que más elogios he recibido el por el poster. Mucha gente se paró a leer toda la información que pusimos y no dio la enhorabuena por el gran trabajo realizado. Hubo gente que hasta nos pidió un ejemplar para poder hacer un comentario. Sobre el libro Mal de escuela me hubiera gustado hacer algo más, pero me lo fui dejando y me he quedado sin tiempo. Me pareció un libro realmente interesante, el cual en contra de mis expectativas me costó muy poco leer.

Con todo lo que he comentado pienso que mi nota debería estar entre 8 y 9.

CARÁCTER (NO) EDUCATIVOe

En el siguiente post trataré de dar respuesta a las preguntas: ¿Cómo se justifica el carácter educativo del movimiento? y ¿Cómo no se justifica el carácter educativo del movimiento?

Como dicen Devís y Peiró cuando practicamos actividad física debemos plantearnos que es lo que se quiere conseguir, con que intencionalidad realizamos las actividades. En el caso de que no se planteen estas cosas podríamos aprender cosas como con cualquier actividad del día a día pero ciertamente no podríamos hablar de educación.

Podemos encontrar tres grandes teorías que apoyan el valor educativo del movimiento:

La primera es la educación de lo físico, teoría que da mucha importancia a las actividades físicas dentro de la educación. Herbert Spencer dice que la primera condición en la vida es la de ser un buen animal y que para prosperar una nación hay que formar buenos animales. Es una teoría que centra la enseñanza en lo corporal.

La siguiente teoría además de centrarse en lo corporal quiere ir más allá y darle otros  valores a la educación física. Estos valores son intelectuales, morales y estéticos. La educación a través de lo físico se centra en las respuestas emocionales, las relaciones personales, los comportamientos de grupo, sociales, etc. De las cuales no debe olvidarse la educación física.

Arnold propone una nueva perspectiva, basada en el valor intrínseco del conocimiento teórico y práctico de la educación física. Aparecen entonces tres dimensiones: la educación sobre el movimiento, la educación a través del movimiento y la educación en movimiento.

La primera se basa en la formación que reciben los que aplican las actividades físicas sobre los demás con diferentes disciplinas. La segunda se basa en los valores extrínsecos indirectamente asociados al movimiento. La tercera esta relacionada con los valores intrínsecos a los contenidos de la educación física. Es necesario saber como llevar a cabo las tareas, por ejemplo levantar pesas.

Respondiendo a la otra pregunta diremos que los valores educativos de los contenidos no se encuentran en ellos mismo, si no en la valoración que nosotros les asignamos.

No podemos dar por hechos los valores en deportes o juegos, porque por ejemplo un juego sexista o excluyente no es educativo. Debemos buscar estrategias metodológicas para que se puedan promover los valores que nosotros deseamos.

SEXISMO

¿Qué es el Sexismo?

El sexismo es una discriminación basada en el sexo o género. También se refiere a las condiciones o actitudes que promueven estereotipos de roles sociales establecidos en diferencias sexuales.

¿Cómo se manifiesta el Sexismo en el Movimiento?

El sexismo lo encontramos en muchos ámbitos de la vida cotidiana, como en la publicidad (ver anuncio). Dentro de la educación física encontramos muchos ejemplos en los que se manifiesta el sexismo. Uno de los que más comentamos en el grupo puzzle es el lenguaje utilizado en las clases por parte sobre todo de los profesores. Otro sería que el hecho de que los alumnos presten más atención que ellas provoca que las clases vayan más dirigidas hacia ellos. Otro ejemplo muy comentado era a la hora de realizar los grupos antes de realizar una actividad, las chicas siempre son elegidas al final por el simple hecho de ser mujeres. Es también llamativo que cuando el profesor deja la clase libre lo normal es que los alumnos ocupen la mayoría del espacio (campo de fútbol y canchas en general) y ellas se queden apartadas en una esquina, o que se saquen cuerdas para saltar para ellas y balones y otros materiales para ellos.

¿Qué se puede hacer para dar luz al sexismo?

Como se puede ver el sexismo se da en muchos lugares y ambientes dentro de la educación física. Una de las posibles soluciones es la ideología del igualitarismo, que pretende buscar la igualdad de derechos y oportunidades para todos. Nosotros como futuros educadores debemos conocer todas las manifestaciones del sexismo y tratar de darles luz de la forma más correcta y eficiente que encontremos.

Lo primero que hice en mi grupo puzzle fue leerles la definición de sexismo para que tuvieran una pequeña base. A continuación lo que hice fue enseñarles un anuncio y un artículo para que me dieran su opinión y que me dijeran donde veían ellos el sexismo. Aquí dejo el anuncio y el enlace al artículo:

http://www.rpp.com.pe/2015-05-07-ventas-de-electrodomesticos-creceran-5-3-por-dia-de-la-madre-noticia_794932.html

Lo siguiente fue que cada uno me dijera a 3 personas relacionadas con el mundo del deporte y menos dos personas todos dijeron deportistas masculinos. Lo cual nos llevó a un debate para tratar de averiguar a que se debía esto.

Por último entre todos y dándoles alguna pista tratamos de contestar las dos últimas preguntas. Fue un resultado bastante satisfactorio y creo que llegaron a entender esta ideología.

Zoquete y Educación Física

En este post intentaré dar respuesta a dos preguntas:

1ª ¿A quién sirve la educación?

2ª ¿Qué es un zoquete en la educación física?

Lo primero que diré es que ambas preguntas tienen múltiples respuestas ya la que yo voy a dar es muy personal, por lo tanto para mi es la correcta pero no con ello quiero decir que sea la única respuesta ni la mejor.

En respuesta a la primera pregunta diré que en mayor o menor medida la educación sirve para todo el mundo y a todas las edades. Nos educan desde pequeños inculcándonos ciertos valores y formas de vida. Pero como ya he dicho antes esto no tiene el mismo efecto en todas las personas. Los educadores a menudo no obtienen el resultado deseado en la persona que está siendo educada, pero a pesar de ello todos acaban teniendo cierto nivel de educación. Creo que la educación siempre tendrá más efecto sobre las personas que quieran aprovechar esta educación que se te está impartiendo. Dentro de este grupo de interesados también hay niveles, ya que no todo el mundo posee las mismas capacidades ni las mismas condiciones de ser educados.

Cuando me plantee responder a la segunda pregunta me costó llegar hasta mi respuesta final. Lo primero que se me vino a la mente fueron las personas poco coordinadas y sin las mejores condiciones para practicar deporte, fueron los primeros zoquetes que tenía en mi cabeza. Seguí pensando y me acordaba de amigos que he tenido que cumplían estos rasgos de zoquete en la educación física y pronto me di cuenta que no era la respuesta correcta o por lo menos no lo era para mi. Puede ser que estas personas no dispongan de las mismas capacidades que otras, pero mientras se esfuercen en conseguir las cosas para mi no son zoquetes. Creo que todas las personas que se esfuercen en conseguir algo por muy complicado que lo tengan dejan de ser zoquetes. Aquellas dispongan o no de las mejores aptitudes para conseguir las cosas pero que no se esfuercen si que lo son. En este caso y según mi descripción podríamos asociar un zoquete en educación física a una persona vaga y que no se esfuerza en conseguir las cosas.

"Hace solo unos años"

Abrí los ojos, como cada mañana. Me disponía a llevar a cabo la rutina de cada día. Todo empezaba con cómo vestirme, no me importaban mis gustos o mis preferencias, solo seguía las corrientes e intentaba ir a la moda. Mi adicción a las marcas solo era superada por mis pocas ganas de estudiar. Mi constante obsesión eran las zapatillas, las tenía de todos los colores, incluso les ponía nombre. No eran unas simples zapatillas, eran unas Nike, tenía otras que se llamaban Adidas, otras se hacían llamar Converse y así tenía una lista interminable. Cuando me las iba a poner, las dudas en la elección me asaltaban por todas partes, no solo importaba si el color era adecuado, también tenía que pensar si lo que representaba la marca era acorde al resto de complementos que llevaba completando mi obra. Y es que esto no era únicamente cuestión mía, mi entorno, mis amigos reconocían mis logros, me daban el aprobado e incluso el excelente según el conjunto que llevara ese día. Me hacía cada vez más popular, ya no era un chico común, los compañeros me admiraban por el logo que llevaba en la camiseta y a mí no me desagradaba tener amigos, podía incluso elegir la gente que me rodeaba y la decisión fue más fácil de lo que pensaba.

A las nueve menos cinco salía de casa, me despertaba con quince minutos de antelación porque en mi interior quería llegar tarde a clase. Para mi disgusto, el profesor siempre me dejaba entrar a clase y desde aquel momento mi único objetivo era el timbre que anunciaba el final. Luchaba por estar en última fila y el bien más preciado era estar al lado de la ventana, y no porque en invierno sintiera el calor de la calefacción y en verano  entrara el refrescante aire. Por aquella ventana entraban un conjunto de historias, un conjunto de situaciones que hacían que la clase pasara más rápido. Mi atención a las palabras de la profesora se limitaba a escuchar mi nombre o hacer alguna gracia para obtener un reconocimiento de los amigos, era la intervención necesaria para seguir manteniendo mi  estatus social.

El sentimiento más parecido a la libertad que experimentaba en el instituto era la educación física, la única asignatura donde no me llamaban la atención. Pero no era solo eso, era uno de los mejores alumnos y mis habilidades eran infinitas. Mi relación con el profesor era única, él era conocedor de todos mis problemas, tenía la sensación que únicamente él se preocupaba por mí.

Llegado un día me metí en un problema, me vi involucrado en una pelea por los amigos que elegí. Yo no quería, simplemente me dejé llevar. Era la hora del patio y estaba de guardia mi profesor de educación física. Intervino y nos separó a todos, cogió a los responsables entre los cuales estaba yo y nos llevó a una sala en lo alto del instituto. Nunca había estado ahí, el camino se hacía largo, nadie hablaba, solo pensaba en qué les diría a mis padres. Justo antes de entrar escuche mi nombre, mi profesor me decía que yo me quedara fuera, los otros pasaron una puerta donde se leía “director”. Ahí tuve una conversación muy extensa y tranquilizadora sobre el modo de vida que llevaba, cambio totalmente mi visión sobre lo que realmente debía y no debía hacer. Los siguientes días intente no juntarme con esa clase de gente. Mi culpabilidad me hacía cuestionarme cada una de mis decisiones y lo más importante para mí era no defraudar al único profesor que confió en mí.

Aquel día cambió mi vida, un pequeño acontecimiento que supondría un efecto dominó. Cambió mi entorno y mis amigos, mis problemas con los estudios desaparecieron. De esa época solo me quedan mis Nike, mis Adidas y mis Converse que siguen conociendo todos.

¿Qué me gustaría que pasara siempre en una clase?

En esta entrada intentaré responder a la pregunta que se nos ha planteado en clase. Como os podéis imaginar por el título de la entrada la pregunta era "¿Qué os gustaría que pasara en siempre una clase?". Obviamente hay muchas respuestas fáciles a una pregunta sí. Un ejemplo sería diversión en todas las clases. Pero nosotros tenemos que ir un poco más allá y justificar bien nuestras respuestas.

La verdad es que si soy sincero la primera respuesta que se me vino a la mente es la de que todas las clases deberían ser divertidas. Por lo tanto, traté de justificar esta respuesta. Se me vinieron muchas cosas a la mente, pero finalmente creo que encontré lo que quería. Creo que cuando mejor aprendes una cosa es cuando estas disfrutado de la misma, tu atención está 100% centrada en lo que estas tratando de aprender. No requiere un esfuerzo el tener que atender o estudiar si te estas divirtiendo. Esta sería la primera justificación a la primera respuesta que se me vino a la mente.

A partir de ahí se me ocurrían cosas para hacer una clase más divertida o amena. Una de ellas era la participación de todos los alumnos, que no fuera un monólogo del profesor. La interacción me parece fundamental para captar en todo momento la atención de los alumnos. Otra cosa que se me ocurrió es intentar poner ejemplos sobre cosas que pasan a diario, para así que los alumnos vean la utilidad de lo que están aprendiendo y de esta forma captar su interés.

Estas son las cosas que creo que deberían pasar en una clase, seguramente haya muchas más que ahora mismo no me vienen a la mente, pero para mi el objetivo principal sería conseguir que todo el mundo disfrute con lo que está pasando en clase.

Antiguos profesores

Creo que en mi etapa escolar, incluyendo la ESO y el bachillerato, por lo general he tenido bastante suerte con los profesores que he tenido. Obviamente hay excepciones, pero son contadas, ya que donde algunos veían a un mal profesor yo veía a una persona que me hacía exigirme más a mi mismo.

También es verdad que hay a algunos que los recuerdo más que a otros, que les tengo un cariño especial. Uno de ellos, el de educación física cuando iba a primaria creo que ha influido bastante en mi decisión de estudiar FCAFE. Supongo que por mi buen comportamiento y mis buenos resultados sentía que me trataba de una forma un tanto distinta a algunos compañeros, era una sensación muy reconfortante que me hacía irme contento a casa casi siempre que tenía clase con el. Podría poner muchos ejemplos, ya que estoy muy agradecido a todos mis docentes por la enseñanza que me han impartido, la educación y como lo han hecho. Comentaré un último caso por lo reciente que lo tengo y por ser en la universidad. Hace 2 años era estudiante de Ingeniería Química. Tenía una asignatura que era Matemáticas I, asignatura bastante complicada como la mayoría de la carrera. En esa asignatura tuve un profesor, , muy bueno en mi  opinión, ya que estaba acostumbrado a impartir clases en institutos y explicaba todos los ejercicios paso a paso, sin saltarse absolutamente nada. Yo siempre decía que explicaba las cosas para tontos, lo cual agradecíamos todos debido a la complejidad de la asignatura. Supimos valorar mas aun a este profesor cuando en el 2º cuatrimestre tuvimos Matemáticas II con otro profesor, el cual explicaba los ejercicios dando por sabidos pasos complicados y abreviando lo máximo posible. Echábamos mucho de menos a nuestro antiguo profesor.

Este mensaje no llegara probablemente a ninguno a casi ninguno de vosotros, pero doy las gracias a todos los profesores que he tenido al largo de mi vida de estudiante.